ARCEASTUR: septiembre 2016

lunes, 12 de septiembre de 2016

MEDIA VEDA 2016

Este año he cambiado de zona de caza y creo que a pesar de no ser un buen año (para mí nunca lo es, que conste en acta ;-) hablo por boca de otros socios del coto, el cambio ha sido a mejor, respecto a temporadas anteriores; un coto con un hábitat perfecto para las codornices y donde podemos alternar zona de secano y zona de regadío.

En términos generales parece que no ha sido una buena campaña de codorniz; con excepciones como siempre pasa con las migratorias y claro está, dependiendo un poco de las jornadas que puedas dedicar; por nuestra parte durante la primera semana de caza tuvimos un goteo constante de codornices, si bien es cierto muchas de ellas sin posibilidad de tirar, pero tanto los perros, como nosotros pasamos días entretenidos sobre todo por las mañanas. Las elevadas temperaturas hicieron que las jornadas de la tarde fuesen muy reducidas y prácticamente no se veían codornices hasta bien entrado el atardecer. A raíz de la segunda semana la escasez de africanas fue pronunciada y apenas se veían media docena de ellas. En septiembre tenía previsto hacer alguna escapada más, pero el tiempo no cambió, las altas temperaturas seguían apretando y el desplazamiento es considerable para cazar tres horas, así que habrá que esperar ya a la general para desenfundar de nuevo el arma. Este es el primer año que también alterné alguna jornada tras las codornices en la montaña, pasando buenos ratos detrás de ellas en otro tipo de entorno. Aunque finalmente las jornadas para mi han sido reducidas, tanto los perros, como yo hemos hecho un poco de ejercicio ;-)

Por parte de los perros poco que decir; el joven Levín se dedicó a correr, correr y correr los primeros días, y cuando comenzó a entender de que iba el tema, lo que no había era codorniz bastante, aún así realizó algún cobro y puso alguna. Lo que demostró es que está físicamente muy bien, porque con el calor que hizo, no fue normal su resistencia. De todas formas me dejó buen sabor de boca y me ilusiona para la general. Bimba floja, para ser su segunda media veda, ha participado poco, si bien es cierto, ha mejorado bastante el patrón y sus maltrechas almohadillas le restaron minutos con respecto al resto, pero la codorniz no parece su fuerte. Xana se defiende, sin más, y Brisa sólo la llevé una mañana a la montaña para que soltase un poco las patas, pudiendo disfrutar de un par de lances con ella. Los que sí que las entienden muy bien, son los perros de mi amigo Aitor, en especial Orange, aunque sin desmerecer a Vito y a Megan, todos ellos nos brindaron unos cuantos bonitos lances.

Con los anfitriones al "fresco"

Desde aquí quiero agradecer a mi amigo Aitor las gestiones realizadas para poder cazar este año con él, y como no, la hospitalidad ofrecida durante los primeros días de caza, ya que gracias a él y a su mujer hemos pasado unos estupendos días combinando caza y ocio en familia. ¡MUCHAS GRACIAS!