SEMANA 01

Miércoles: Después de abrir algún regalín, desayunar el típico roscón de Reyes y pasar la mañana en familia, fui a dar una vueltuca al monte en busca de otro rosco por la tarde.  En esta ocasión me llevé al veterano Rey junto con Xana y Ares, desde su retiro un par de ratos sigue saliendo al monte en cada temporada. Pero hoy no tuvo suerte y no pudo morder; ni rastro.

Jueves: jornada infernal, lluvia y lluvia y más lluvia, a momentos parecía que había algún cabrón con una manguera encima nuestra. De hecho, la jornada fue algo más reducida de lo esperado, porque en cuanto J.Benito dijo, “vamos pal coche y a comer algo a algún chigre” dejamos de lado la idea del cambio de cazadero y lo que cambiamos fue de ropa y a reponer fuerzas. A lo largo de la mañana tuvimos los perros en tres ocasiones en muestra, por su quehacer era de tres arceas fijo, todo hacía presagiar que por allí habían estado; aunque la triste realidad es que no vimos ninguna, sólo los dos regalitos en forma de mierda que nos dejaron las dos primeras. Por más que buscamos en las zonas, los perros fueron incapaces de su localización en la rebusca. Esta temporada, estamos notando que en muchas ocasiones nos está costando bastante dar con algunas en la rebusca…o son más listas, o nosotros y los perros más tontos, será lo segundo L

Sábado: parece que el 2016 ha traído el invierno en forma de viento y lluvia. En la primera mitad del día, Pepín y yo echamos una arcea, a la cual pude tirar muy larga cuando intentaba llegar a los perros (Lola, Brisa y Wolf) que estaban asistidos por Pepín, pero la arcea se levantó muy por delante y yo la vi de casualidad, aunque un poco lejos. Y así pasó el resto de la mañana, sin pena, ni gloria…no vimos más y J.Benito tampoco tuvo contacto con ninguna. A medio día cambiamos y por la tarde, nosotros echamos un par de ellas y J.Benito otras dos. Pepín no pudo tirar a una que le puso Lola y Wolf, le salió tapada y luego desapareció. En cambio yo tuve más fortuna y pude abatir la que me puso Brisa, buen cobro de Ares, que no termina de convencer, pero parece que tiene un radar para cobrar; luego nos deleitó con una muestra que nos hizo pensar que tenía una, pero aún estamos pendientes de saber que puso, porque las veteranas no prestaron mucha atención a la zona, así que un ¡uy uy uy! Mientras J.Benito echaba dos arceas, la primera sin poder tirarle entre unos pinos; pero la segunda no tuvo esa suerte, fue abatida, aunque desgraciadamente fue tirada tan cerca que los 40 gramos hicieron estragos en ella, vamos que la desintegró… ya le dije que eso pasa por apuntarles tan bien, a mí no me pasa ;-)

Domingo: le tocó a Xana y a Bimba hacer instrucción por el monte conmigo. Echamos una arceuca, que desgraciadamente sólo pude escuchar el pla pla pla de su aleteo y hasta luego, Xana estaba en muestra, en un pequeño claro, me coloqué donde creí más oportuno, y al rato apareció Bimba, llega y muestra sin ver a Xana, pero la muestra le dura lo justo L y entra a lo loco al monte más tupido y allí escucho salir la arcea, pero sin poder verla, un día más rebusca infructífera, cierto es que por donde estaba, todo era favorable para ella. Al menos participó en el lance la joven Bimba, que poco a poco va sumando experiencias, aunque muy poco a poco…