SEMANA 49

Martes: jornada divertida, con varios lances aunque mal repartidos, para las once habíamos echado tres arceas y hasta pasadas las cuatro y media no volvimos a tocar rastro. En esta ocasión, acompañó la fortuna y la primera no se hizo de rogar mucho, a los pocos minutos de adentrarnos en el bosque, comenzamos a ver rastros y antes de darnos cuenta, Wolf estaba en muestra y apenas dos pitidos del collar la arcea emprendía la huida, pero escogió mal la vía de escape, ya que vino a estrellarse contra mi compañero, que no perdonó. Luego estuvo en muestra Brisa, pero esta no se dejó ver, aunque había rastros frescos y todo apuntaba que por allí estaba, aunque no fuimos capaces a verla. Un rato más tarde, el collar de Wolf estuvo sonando durante unos minutos, hasta que Pepín consiguió llegar a el, estaba puesto, pero la arcea era la que no estaba; cuando me acercaba a la zona se me levantó por la espalda; llamé a Pepín, para avisarlo e ir en su busca. Empleamos un buen rato, pero apareció, el campano de Brisa dejó de sonar y sin tiempo a que pitase el collar, ya escuchamos la arcea salir, esta vez mi posición es favorable y la abato. Seguimos en ruta y ni rastro, más tarde cambiamos de cazadero y de perros y ni rastro, pero cuando la tarde entraba en su recta final, el collar de Xana comenzó a sonar, una carrerita, me coloco, pero ya veo la perra que me mira, como diciendo “no está, pero estaba hace un ratín” ¡jejeje! la perra siguió trabajando la zona y de nuevo puesta, pero nada, luego es Levín el que se queda en muestra, esta vez sí que pensé que la tenía. Mientras ocurría todo esto Pepín estaba acercándose a la zona, ya lo había avisado por walkie, justo fue llegar a la zona y Lola en muestra, unos doce metros más alejado de la muestra anterior de Levín, imagino que le habría pegado un bote al perro. Xana llegó y patroneó a la jefa, la arcea salió, mi amigo erró el tiro (raro, pero a veces también le pasa ;-)) y yo pude tirar con fortuna. Levín aportó el cobro, que por cierto, se le da bastante bien. Pasada media hora escasa, suena otro collar, esta vez Wolf, llegamos a el, Xana y Lola patronean, pero Levín adelanta a Wolf y guía hacia arriba, nos despista y dejamos la arcea atrás y de lado, sale tapada y a pesar que mi compañero puede dispararle en la distancia no hay suerte. De segundas la pone Lola, pero ya no estaba y no hubo forma de encontrarla; seguidamente para el coche que ya no da para más la tarde.

Jueves: hoy tocaba familia y descansar un poco el cuerpo, así que la jornada fue muy reducida, un par de horas por la tarde, que aproveché para sacar al viejo a estirar un poco las patas, con Bimba. No vimos nada, unos rastros atrasados y nada más.