El cazadero. |
La merienda. |
Amanecía un día frío, de hecho ya se veían las primeras nieves del año en las cimas de los montes de la Cordillera Cantábrica. Me acompañaba Fran y a primera hora le dimos una mano a las perdices en la parte alta del coto (1600m.), echamos un bando de nueve, sin opción de tiro, de quebrada las pusieron Brisa y Rey, esta vez, aunque algo larga, si le pude tirar a una, pero se fue sin un rasguño. Seguimos intentando dar con ellas, pero ya no hubo suerte, hasta medio día que Brisa volvió a ponerme una perdiz y en esta ocasión mi error fue de colocación, saliendo la perdiz tapada por unas escobas y no pudiendo tirar. Como veis tengo un amplio repertorio de errores, de tiro, de colocación......ya os iré contando más ¡jejejeje!
Alrededor de la una decidimos bajar y dar una mano, en las matas de roble del coto, en busca de alguna arcea, pero ni rastro de ellas, así que sobre las cuatro de la tarde recogimos y nos vinimos de vuelta, no sin antes hacer un alto en el camino para recuperar fuerzas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario