Sábado: la
crónica de la jornada es reducida, vimos una cagada de arcea, escuchamos el
collar de Wolf, que estuvo en muestra un buen rato, pero que nos costó un huevo
y parte del otro poder llegar al perro y justo cuando estábamos llegando dejó
de sonar y no hubo opción a nada, este fue el resultado de siete horas de monte
y dos cazaderos pateados por Pepín y un servidor, está claro que no acertamos
con los montes escogidos y que las arceas están más bien escasas.
Afortunadamente “el abuelo” por la mañana estuvo más fino que nosotros y se
hizo con una arcea, los perros le dieron unos rastros en una orilla de un
pastizal, y buscando por las matas cercanas, finalmente los perros se quedaron
en muestra y cuando se dio cuenta ya la tenía encima de la cabeza, un tiro y al
suelo, pero cuál fue su sorpresa cuando le llegan los perros, Rocky y Sol, con
un trozo cada uno, el tiro la había diseccionado a la mitad.
Domingo: Pepín y
yo nos fuimos a despedir el año hasta la provincia vecina, J.Benito estaba
cansado del sábado y decidió quedarse en casa. Disfrutamos de tres bonitos
lances con las pitorras y de otro par de lances con las perdices, pero no todos
con final feliz para nosotros ¡jejeje! Pronto tuvo lugar el primer encuentro
con una pitorra, Lola se quedó varias veces puesta y finalmente, logró bloquear
la arcea, junto con su hija Sell y Pepín la pudo abatir, yo escuché el lance
desde la lejanía. Más entrada la mañana el collar de Brisa comenzó a sonar, yo
llegué a colocarme cerca de la perra, y mi amigo estaba un poco por encima cubriendo
más terreno, pero nos la jugó y sólo la escuchó salir Pepín. Nos separamos para
intentar buscarla, y yo tuve en muestra a Xana y Brisa, pero ya no estaba y mi
compañero le pareció que quizás hubiese movido otra distinta, pero no pudo
verla tampoco. Y antes de volver a juntarnos para ir en busca de un par de
bandos de perdices que nos tienen la guerra ganada, conseguí hacerme con una
pitorra a muestra de Brisa y Xana. Con las perdices, nada que hacer, esos dos
bandos, en particular, nos tienen la moral comida, no hay forma de pegarles un
tiro, dejamos en el remolque a Sell, para ir con la veteranas a por ellas, y nada…guías,
muestras, guías y más muestras, pero ni arrimase…
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