SEMANA 03

Recuperando fuerzas...

Jueves: al final el temporal que pronosticaban para esta semana no fue para tanto, y el posible movimiento de arceas que podía acompañar dicho cambio en la meteorología no se ha producido, al menos por la zona que cazamos; a pesar de acompañarnos un guía de lujo, nuestro querido amigo Laureano. Echamos un par de arceas, una de ellas ya estaba aclimatada al lugar, liándosela a los perros de nuestro amigo, que no pudo abatirla; Tino y yo sólo escuchamos los tiros en la lejanía, luego recibimos aviso, para intentar dar con ella en la rebusca, pero resultó infructífera. Sobre el medio día tuvimos otro encuentro fugaz con otra de las de pico largo, justo cuando nos adentrábamos en una zona un poco más densa de vegetación, comenzó a sonar el collar de Levín, un par de pitidos y sin tiempo para reaccionar, ya veo a Laureano tirar, pero le había salido muy tapada y no hubo fortuna. En esta ocasión el perro la había apurado en exceso, porque mi amigo ya lo había visto guiar, a veces la impaciencia le puede ¡jejeje! Estuvimos un buen rato intentando dar con ella, pero hoy no era el día…no conseguimos dar con ella. Y durante el resto de la jornada no conseguimos ver más.

Sábado: día entretenido y con final feliz ;-) en esta ocasión nos acompañó un poco la suerte; esa que en otras ocasiones nos da la espalda. La primera parte del día, cazamos por separado; Pepín echó una arcea, después de un buen trabajo de Soja y Wolf, pero la arcea tenía prisa y no quiso esperar mucho por mi compañero. Y yo, más de lo mismo, otra que la estaban esperando ¡bufff! Pone Xana, pero sólo está la cagadita, vuelven a poner Xana y Levín, tampoco está y de terceras, cuando me estoy acercando a Xana, la veo que echa a correr, pero yo no consigo ver la arcea, aunque la perra estaba claro que sí. Cambiamos de zona, y el resultado fue el mismo, pero en esta ocasión el cazadero era de los duros y nos tocó sufrir, dos muestras; primero de Lola, a la que se unieron el resto luego, pero lo único que había era mierda, el culo ya había volado; de segundas es Xana quien la pone, pero tampoco conseguimos verla. Eran las tres de la tarde y todo apuntaba que no tocábamos pluma; pero en ocasiones, quien la sigue…la consigue. Decidimos cambiar de nuevo de zona y sacar sólo a las perras, para intentar asegurar y resultó, a la tercera fue la vencida. Al poco de adentrarnos en el monte, comienza a sonar el collar de Lola, pero no avanzamos casi y rompe la muestra, poco después Xana da rastro, e incompresiblemente, arranca una arcea unos metros por delante. Incomprensible…porque Xana es muy prudente, junto con Lola son las más prudentes, a veces demasiado; nos resultó extraña la metedura de pata de la perra. Vamos en su busca y Lola pone, Xana patronea y la arcea sale larguísima; nos dirigimos en su búsqueda; pero no conseguimos que Lola venga, a veces es muy necia, y la mayoría de las veces con razón, al poco suena el collar, un par de pitidos y sin tiempo a reaccionar vemos la arcea que viene hacia nosotros, daba la impresión que a posarse delante, pobre…vaya susto llevó, un tiro de cada uno y al suelo. Seguimos en busca de la otra y conseguimos hacernos con ella, de nuevo Lola, y buen disparo de Pepín. Era tarde, pero aún quedaba tiempo para una más; cuando ya retirábamos, comienza a sonar el collar de Lola, Pepín me avisa y cuando llego ya veo la perra, me adelanto a ella por un lateral y justo levanta la arcea, pudiendo abatírsela. ¡Qué buena eres Lola!

Los restos...

Como anécdota de la jornada, hemos encontrado un plumero de una arcea en el monte; daba la sensación que había sido comida por una alimaña, no parecía el típico plumero que deja una arcea al ser abatida y cobrada por los perros. Curiosamente el 24 diciembre había estado cazando allí Pepín y le había tirado a una arcea, que creyó hacer alcanzado, pero no consiguió localizarla ni viva,  ni muerta…puede que sí que la hubiese dejado herida/muerta y algún animal hubiese dado cuenta de ella.

Domingo: la fortuna sigue de cara, he conseguido el cupo para media mañana y en un intervalo de tiempo muy corto, algo con lo que no estoy nada familiarizado ¡jejeje! Contento también por la actuación de Brisa, que llevaba mucho tiempo mal y hoy parecía que resucitaba, a pesar que no está bien físicamente, pero estuvo fina con las arceas. La primera estaba en uno de esos rincones, que tienen escrito “arcea presente” ¡jejejeje! y la verdad que en esta ocasión estaba; en cuanto se adentró un poco en la zona Brisa, se quedó tumbada y poco después botó la arcea, que me salió favorable, un disparo y cobro de la perra; bonito lance. Poco después, de nuevo Brisa marca unos rastros y finalmente se queda en muestra; en esta ocasión la arcea levanta vuelo bastante por delante de la perra, con la fortuna que disparo un tiro y la veo caer; pero el cobro se complica; la zona era un poco cerrada y la arcea se queda colgando en unas ramas; después de unos minutos de incertidumbre logro localizarla. Y para rematar la hora y media más fructífera de mi historia cinegética, de nuevo Brisa comienza a marcar unos rastros, medio muestras, rastreo, hasta que se queda inmóvil frente a una mata; segundos después veo salir la arcea en vuelo rasante, un tiro y excepcional cobro de Brisa. Contrariamente a mi parecer del jueves, hoy si me dio la sensación que se había movido alguna arcea…esperemos siga entretenida esta recta final de temporada.

Brisa y su recompensa.

Cobro complicado para los perros ;-)