SABADO 24 Y LUNES 26 DE DICIEMBRE

El sábado tuvimos un día entretenido, echamos cinco arceas y una gacha, y se lograron abatir tres y la agachadiza. Todas ellas de la mano de mi amigo Pepín, que no perdona la vida a ni una; yo en cambio sigo con la mala racha de este mes, y cada vez me hago más ecologista ¡je,je!
Al rato de comenzar la jornada, Brisa echó la primera, ni nos dimos cuenta prácticamente, pero de segundas la mostró, aunque, tanto Pepín como yo, estábamos lejos. Aún así, le tiré los dos tiros, pero sin fortuna. Y no conseguimos volver a echarla. A media mañana Lor le mostró una arcea a Pepín, que después de una fabulosa guía, Pepín logró abatir. Yo estaba lejos y sólo escuché el disparo. A los pocos minutos, de nuevo localizamos otra dama; en esta ocasión es Lola la que la bloquea entre unas escobas; nos llevó un rato dar con la perra, que estaba bastante lejos, Pepín se acercó a la muestra de Lola y yo me quedé fuera de las escobas; cuando la arcea salió, mi compañero, de un rápido disparo la bajó al suelo; yo no pude verla. Sería aproximadamente medio día y no conseguimos ver más hasta casi las cuatro de la tarde.
En ese instante vivimos uno de los lances, hasta el momento, más bonitos de la temporada. En una rieguina de unos cincuenta metros y con ambas laderas de escobas; los perros nos tuvieron en vilo durante unos minutos, donde disfrutamos de las muestras y guías de Lola, Lor, Brisa y Rey; llevando la iniciativa en todo momento la setter de mi compañero; y finalmente resolviendo ella y Brisa el lance, y materializándolo Pepín de un tiro genial. A los pocos minutos Rey se quedó en muestra en otra riega muy cercana, pronto llegaron el resto de perros que comenzaron a rastrear la zona, dando indicios de que otra arcea había estado allí, e instantes después; de nuevo Lola, la iba guiando, pero en esta ocasión nos estábamos adentrando en una zona muy cerrada de escobas y cuando; tanto Lola, como Brisa, que terminaba de unirse al lance, la tenían bloqueada y yo estaba entre las perras, sólo pude oir el aleteo de la arcea al salir un par de metros por delante, sin dejarse ver ni una décima de segundo. Volvimos a escuchar los collares de los perros, pero no pudimos adentrarnos más entre las escobas y tampoco pudimos ver de nuevo la arcea.
Lo dicho, un día entretenido.

Helada con la que amanecía el lunes.

Golfo mostrando agachadiza.

El lunes amanecía un día muy frío y con una fuerte helada, así que decidí cazar en una zona de pinos. Hoy cazaba sólo, así que me llevé todos lo perros, con la intención de turnarlos. La jornada comenzaba animada, ya que nada más entrar en el cazadero el collar de Brisa comenzó a sonar, cuando estaba llegando a la perra, ya observé por el suelo que había rastros de arcea, pero esta ya no estaba, estuve un buen rato intentando localizarla, pero no lo conseguí. Más adentrada la mañana otra muestra en otro pinar, en esta ocasión de Rey, animó la jornada pero al igual que a primera hora la dama ya se había ido, y tampoco logré volver a echarla. Decidí cambiar de cazadero y fuí en busca de una de las arceas que se nos habían escapado el sábado; pero ni rastro. Sobre las cuatro de la tarde, recogí y me fuí para casa, de camino saqué a Golfo en un prao a gachas; ya que al final se había quedado en el remolque todo el día.
Seguiré intentando hacerme con alguna pitorra el próximo sábado, y despedir el año como Dios manda.

SABADO 17 Y DOMINGO 18 DE DICIEMBRE

Los veteranos de sesenta y tantos con las pitorras de la jornada.

 Esta semana podemos decir que la climatología nos ha fastidiado un poco los planes de caza. El jueves hizo mucho viento y odio cazar con viento, no me siento cómodo en el monte y menos cuando voy sólo, como era el caso del jueves; así que me quedé en casita y aproveché para hacer otras labores.

El sábado, cambiamos el viento por el agua, y una buena mojadura cogimos Pepín y yo; pero lo que no cogimos fue ninguna arcea. Si es cierto que vimos dos, pero no nos dejaron disfrutar de ellas, ambas se volaron sólas y sin dar opciones a volver a verlas. Si tuvimos a los perros en varias ocasiones en muestra, pero sin ver nada. Por la zona también se encontraba otro cazador (Otero) que tubo más suerte que nosotros y logró abartir una becada y echar otra. Agradecerle que nos indicase una zona que no conocíamos del monte que estábamos cazando, en la cual echamos prácticamente toda la mañana y fue donde vimos una de las arceas.

Había más corzos que becadas.

El domingo me iba para el coto de León con Tino, J.Benito y Fran, a ver si teníamos un poco de suerte y lográbamos traernos alguna pitorra para Asturias. Y los planes fueron cambiando durante el transcurso del viaje, ya que cuanto más nos acercábamos al coto de montaña, más nieve se veía en los márgenes de la carretera y en las tierras cercanas a esta. Así que cambiamos el rumbo y nos fuimos a los cotos que tenemos en el llano, donde cazamos la codorniz, pero que también tienen matas de robles; aunque particularmente no me gusta cazar en ese tipo de cazadero, pero las circustancias mandan...
De todas formas hubo suerte, día frío, pero despejado, pocos cazadores por la zona y vimos tres pitorras, de las cuales fueron capturadas dos. La primera fue abatida por J.Benito, después de un sin fin de levantes, yo creo que la mató de aburrimiento. En esa zona no vimos ni un rastro más, así que sobre las doce y media cambiamos de cazadero. Por la tarde, nada de nada, ni un rastro, hasta casí última hora y en el límite del coto, cuando el collar de Rey comienza a pitar, me acerco al perro, Tino intenta colocarse un poco más arriba, y se levanta una arcea unos treinta metros por delante del perro, la veo tan fácil, tan fácil...que fallo el primer tiro y repito con el segundo el fallo (soy un paquete); Tino no la había logrado ver. Cuando estoy rezando en hebreo y cargando la escopeta, se levanta otra pitorra; afortunadamente esta si lográ abatirla Tino de un buen disparo y buen cobro de Rey. Seguimos con la rebusca de la primera, en el segundo levante es atropellada por la joven Besta, más adelante tres muestras de Rey, en las cuáles ya no está la arcea y hasta hoy. Al final, la tarde se animó y cuando nos dimos cuenta casi eran las cinco de la tarde, y aún teníamos un largo viaje de vuelta a casa.

Aprovecho la ocasión para dar la enhorabuena a nuestro amigo Guti (representante de Asturias), por el subcampeonato de España de Caza de Becada conseguido el sábado 17 de diciembre en su XXI edición celebrada en Sos del Rey Católico (Aragón). ¡¡FELICIDADES CAMPEÓN!!

XLIII CAMPEONATO DE ESPAÑA DE CAZA MENOR CON PERRO (DAROCA 10 DE DICIEMBRE DE 2011)

Este fin de semana se celebraba el XLIII Campeonato de Caza Menor con Perro en Daroca (Zaragoza) y hasta allí nos desplazamos.
El viernes madrugamos y nos fuimos bastante temprano, nos esperaba un largo viaje y queríamos aprovechar la tarde para conocer un poco los terrenos donde se desarrollaría la prueba.
Llegamos sobre la una del medío día, comimos y nos dirigimos al albergue donde la Federación Asturiana de Caza nos había reservado alojamiento. Por la tarde estuvimos dando unas vueltas con el coche por la zona donde se iba a desarrollar el Campeonato, viendo el emplazamiento de la salida y cuando la luz del sol se iba apagando dimos un paseo por la ciudad.
Daroca una de las ciudades más importantes en el devenir histórico de Aragón, lo que prueba el privilegiado patrimonio monumental y artístico que conserva. Pasear por sus calles cargadas de siglos y contemplar el esplendor de sus murallas es una experiencia inolvidable.
A las 19:30 se celebraba el sorteo de jueces, lectura de normas, verificación de documentación, etc...y a continuación la cena. En el sorteo de jueces a Pepín le tocó el juez que acompañaba a uno de los representantes de Andalucía; y a mi me tocó uno de los representantes de la Comunidad Valenciana (José Manuel Fabregat).
El sábado amanecía un día frío, pero despejado y sin lluvia; después del reparto de precintos, walkies, instrucciones y las fotografías de rigor, se dió la salida a las 8:30 de la mañana. Una salida calmada y sin las típicas carreras locas de estas competiciones. Yo me dirigí, tras José Manuel y su Braca, hasta una zona del coto donde prácticamente estuvímos toda la mañana detrás de las bravísimas perdices; de las cuáles logró abatir una de un buen disparo, lo que a la postre le daría el puesto catorce de un total de veintidos participantes. Buen día, con varios levantes de perdices, buen cazadero y buena compañía.
Pepín consiguió un meritorio décimo puesto en la clasificación, consiguiendo abatir una perdiz y una becada; la única que se vió en el competición. Si bien es cierto, que pasó un día muy entretenido tras las perdices, y que tuvo oportunidad de hacerse con alguna pieza más, pero la suerte no estuvo de su lado.
Impresionante recibimiento a la llegada al control, que se ubicó en la plaza del Ayuntamiento de Daroca; donde apróximadamente unas mil personas recibieron a todos los participantes a su llegada con fuertes aplausos y gritos de ánimo ¡¡impresionante!!

Una experiencia fantástica e inolvidable, un ambiente espectacular, una perfecta organización, un buen cazadero con perdices bravísimas y mucha gente amable que nos ayudó en todo lo que necesitamos.
Sólo hacer una pequeña crítica a nuestra Federación Asturiana, ya que prácticamente todos los participantes iban acompañados por algún representante de su Federación; pero en nuestro caso no se dignó acompañarnos nadie de nuestra Federación, un poco triste.

PODIUM
1º Francisco Manuel Mateos Martí (Comunidad Valenciana)
2º Pedro Gustavo Hernández Machín (Canarias)
3º Mikel Iturralde Barrenechea (País Vasco)

Pepín verificando la documentación.

Pepín y su juez.

Pepín intercambiando opiniones con
Jesús Oliva (Campeón 10-11)

Cenando con el equipo del País Vasco

Dos asturianos perdidos en Aragón ¡je,je!

Pepín con el dorsal 6, y el resto de
participantes en la salida

Pepín y su juez a la llegada a control,
entregando la arcea



Yo sujetándole el arma a J.Manuel,
mientras entrega la caza abatida



Mateos entregando las
perdices en control

Pódium

El campeón y el segundo y tercer
clasificado

Cazadero 01

Cazadero 02

Cazadero 03

Los protagonistas
Pepín y Lola de Serrasueve

JUEVES 08 DE DICIEMBRE

Pepín y yo con Besta, que hoy a trabajado muy bien.

El jueves nos fuimos a cazar con la intención de dejarlo a medio día, con el propósito de guardar fuerzas para el sábado, ya que Pepín participaba en la final del Campeonato de España de Caza Menor con Perro en Daroca (Zaragoza) y yo le acompañaba como juez. Pero a excepción de un torcaz que matamos nada más comenzar la jornada, no vimos nada más hasta la una del medio día, que se animó la jornada y nos dieron las cuatro de la tarde en el monte. Echamos tres arceas y logramos matar un par de ellas.
La primera fue bloqueada por Rey en unas escobas, la pitorra nos dejó que llegásemos al perro y nos colocásemos, cubriendo bien las posibles escapatorias de esta y cuando intentó huir se encontró con un buen disparo de mi compañero. La segunda fué localizada y mostrada por Lor, y de nuevo abatida por Pepín. Y la tercera del día, fue mostrada por Brisa, y patroneada por Rey; pero al igual que me pasó la semana pasada, a mi me tocó la arcea rabiada del día y cuando aún me faltaba unos metros para llegar a los perros, la becada ya levantaba vuelo bastante por delante de Brisa, ladera arriba y entre unos avellanos; le suelto un par de disparos de desesperación y con las mismas se va. Estuvimos intentando dar de nuevo con ella, pero no hubo suerte, por más que buscamos y rebuscamos, se la había tragado el bosque. Espero que la próxima semana tenga algo más de suerte y me toque alguna becada un poco más mansa. Y mucha suerte, para mi amigo y compañero de fatigas, en el XLIII Campeonato de España de Caza Menor con Perro.

MARTES 06 DE DICIEMBRE

 Hoy teníamos cacería en el coto de Cantabria, Fran, J.Benito, Laureano y yo, y para allí nos fuimos. Desastre de día, no vimos nada de nada; en el lote que nos tocaba había otros cuatro o cinco cazadores más y ni un tiro en toda la mañana. Esta temporada no estamos encontrando sordas en estos lotes de Cantabria, cuando otros años siempre nos divertíamos con varias becadas. Ya hace quince días que había ido yo, sólo eché una sorda, y hoy entre todos nada de nada.

Brisa con agachadizas.

Brisa con agachadizas.

De regreso a casa paramos en unos praos que suelen tener gachas y saqué a Brisa del remolque para que por lo menos viese algún pájaro antes de volver a la perrera. Las mostró y guió muy bien, parece que les tiene cogido el truco.

SABADO 03 Y DOMINGO 04 DE DICIEMBRE

Este sábado echamos tres becadas y logramos hacernos con dos. Después de un jueves bastante aburrido y con escasez de arceas, la climatología había vuelto a dar un giro y esperábamos que hubiese algo de movimiento. La verdad es que anduvímos mucho monte y no dimos más que con tres. La primera fue mostrada por Rey en una zona preciosa de acebos y escobas, y abatida de un certero disparo de mi amigo Pepín. La segunda fue localizada y mostrada por la setter de mi compañero, Lola (hija de Dum de Senegiro), y una vez más abatida por el dueño de la perra. Después de unas horas de búsqueda infructuosa, decidimos separarnos para dirigirnos hacia el coche por dos riegas, por una iría Pepín y por la otra un servidor. Al poco de entrar en la riega, Rey comenzó a marcar rastros de arcea, algo atrasados, pero cuanto más subíamos por la riega, más se calentaba el perro. Hasta que se quedó en muestra, y unos metros por delante y en la otra orilla del regatu, Brisa hacía lo mismo. Me adelanté a ellos y estos fueron guiando y mostrando durante unos metros más; pero la arcea tenía prisa y apróximadamente unos cuarenta metros por delante de los perros se levantó; larga y algo tapada, igualmente yo le tiré, pero no hubo suerte. En la rebusca fué bloqueada por Brisa entre unas escobas imposibles de atravesar por mí, me coloqué en un alto, esperando poder ver salir a la arcea, pero no era mi día de suerte. Así que con estas nos fuimos para el coche, al llegar me encontré con Pepín, que no había visto nada.

El domingo fuí invitado por la cuadrilla de Carlos a cazar con ellos en Nava. El día prometía, pero sólo se quedó en eso...una promesa. Seis cazadores, en un cazadero, para mi gusto, de los mejores (al menos de los que yo haya estado en Asturias) y sólo se logró abatir una becada y una agachadiza. Si es cierto que se movió alguna más, pero no muchas y todas ellas con un denominador común "estaban rabiadas". Carlos y yo movimos una casí al comenzar, aunque no logramos verla, horas después fue tiroteada por Laureano, sin fortuna. Echámos una otras dos veces, en la primera ocasión mostrada por Rey, pero ya no estaba y en la segunda, se levantó sóla unos sesenta metros por delante de nosotros; aunque esta vez si conseguí verla, pero no logramos echarla de nuevo. Laureano mató una becada mostrada por su joven setter Menta (hija de Mago de Sosobal) y la que ya mencioné que había tirado sin suerte. Diego y Chema también movieron otra, que estaba también intratable; y Atilano más de lo mismo. Vamos que no nos acompañó la suerte. Por la tarde dimos otra mano a unas rieguinas más cercanas al coche, esta vez saqué a Besta. El resultado de la tarde fué peor que el de por la mañana, no movimos ni una pitorra, ni un triste rastro de ellas. Aunque Besta dió con una gacha en un trozo de prao en medio de un monte, que trabajó muy bien el rastro y la mostró unos segundos, tuve la suerte de poder abatírsela y le costó, pero logró cobrarla también. Así que al menos el día terminó con un final feliz, ya que la joven Besta se ha estrenado con su primera pieza salvaje; no ha sido una arcea, pero es su prima pequeña ¡je,je!
Dar las gracias a Atilano, Carlos, Chema, Diego y Laureano por la invitación, y a ver si en otra ocasión la suerte acompaña un poco más. Un saludo a todos.

Fran que se fué sólo para León, consiguió echar una pitorra en un par de ocasiones y colgarla al segundo levante, después de que la intensa niebla matinal se despejase. Ambas veces trabajada por su perra Aura (hermana de Brisa).

JUEVES 01 DE DICIEMBRE

De este jueves poco hay que contar. De hecho las únicas arceas que ví fueron las de las pegatinas del remolque. Si es cierto que eché una becada dos veces pero ni la ví. La primera vez la puso Brisa y cuando estaba llegando la perra ya había roto la muestra y la arcea ya no estaba; al rato, de nuevo Brisa y esta vez patroneada por Golfo, lograron bloquearla contra un matu de escayos, pero la muy jodía apeonó entre los escayos y sólo pude oirla levantar el vuelo.
A medio día se levantó una viento bastante fuerte y cuando llegué al coche sobre las dos decidí dar por finalizada la jornada.
Con estas temperaturas tan primaverales y el viento que hacía, daba bastante asco estar en el monte. Espero que la climatología cambie pronto, porque a lo tonto, ya estamos en diciembre y el tiempo no mejora para los intereses de los becaderos.

SABADO 26 Y DOMINGO 27 DE NOVIEMBRE

Este fin de semana ha estado entretenido, ya que hemos visto varias arceas y nos han dado bastante juego.
El sábado con Pepín, echamos siete becadas y conseguimos colgar cuatro. Al poco de comenzar la jornada, pudimos abatir dos arceas en un mismo pinar, una cada uno, después de un buen trabajo de los perros, y excelente cobro de Lor y Brisa, respectivamente. Más tarde, y una vez más esta temporada, fallé una arcea puesta por Brisa y patroneada por Golfo. La tercera en caer, nos dió  bastante guerra, primero se voló sóla, luego la puso Brisa y Golfo, pero no pudimos tirarle, y finalmente la echó Golfo y pudimos tirarle cuatro tiros, callendo de ala a unos cien metros riega abajo de donde le tiramos; Pepín dictaminó que mi segundo disparo fué el que la tocó. La quinta becada de la jornada estaba intratable, mostrada por Lola, Lor y Brisa una primera vez, y ya no estaba; luego se voló sóla, mostrada en dos ocasiones más por Brisa, pero se volaba en segundos, sin poder llegar a la perra. A la quinta fue mostrada por Lola, Lor y Brisa; siendo esta última quien resolvió el lance, pero sólo dió opción a un tiro, lejano y tapada. La sexta ni arrimarse a ella, parecía un fantasma, fué mostrada por Lola y Lor en dos ocasiones, pero ni opción a encarar la escopeta. Y la última dama vista, fué muy bien trabajada por Lola y Lor, que la bloquearon a la perfección y fué abatida por mi amigo Pepín. Una jornada muy divertida.

El domingo nos fuimos a tierras castellanas, viendo el panorama que hay con el coto de Villaviciosa, le conseguí una tarjeta de invitación para Tino que aún no había sacado la escopeta de la funda este año y Moly estaba desesperada en la perrera. Fran cazó la zona más alta del coto y Tino y yo estuvimos más bajos. Hasta el medío día, cazamos con Moly, Jackie, Rey y Besta; luego dejamos en el remolque a los jovenzuelos que ya estaban agotados y seguimos con Moly y Rey.

Por la mañana cazamos una ladera soleada, pensando que quizás habría alguna pitorra tomando el sol, ya que la helada que había era de las buenas. Y tuvimos suerte. Rey localizó una arcea, que fue levantada por Besta, su primer contacto con las arceas; ya había mordido alguna, pero es la primera que levanta; y lo bien que le vino, porque se picó bastante y durante un buen rato nos deleitó con una búsqueda como si fuese un perro adulto. En la rebusca Moly y Rey pusieron otra pitorra, que ya no estaba, y que unos metros más adelante Tino logró abatir de un certero disparo y un buen cobro de Moly. Al rato dimos con la primera que habíamos echado pero en esta ocasión se levantó sóla y en una zona muy cerrada, seguimos en su busca y después de aproximadamente una hora, Rey la bloqueó, pero cuando nos dirigiámos a él, la chocha ya venía a nosotros, y de nuevo Tino de un disparo la baja; en esta ocasión es la joven Besta la que cobra la becada.
Por la tarde, no vimos nada hasta última hora que Rey puso una arcea en unas escobas, en las cuales la pitorra nos la jugó y levantó vuelo muy lejos del perro y de la escopeta, en la rebusca se voló sóla al paso de Tino que pudo ver la dirección que tomaba, y a la tercera fué mostrada por Rey y Moly; pero también nos la jugó ya que se cubríó muy rápido al salir y mis dos disparos se quedaron en un roble y el que pudo tirar Tino desde su posición, esta vez, no hizo blanco; no logramos echarla de nuevo. Luego nos encontramos con Fran que había logrado hacerse con una arcea, y le parecía que había echado otra, aunque no la había visto.

Fran, que por cierto, me había regalado por mi cumpleaños un pajarero hecho a mano por nuestro amigo Angel Lamar, una verdadera obra maestra. Gracias a ambos.

JUEVES 24 DE NOVIEMBRE

El jueves he ido a cazar sólo, ya que Pepín no podía por motivos laborales. Amanecía el día con una niebla bastante espesa, así que estuve esperando dentro del coche un buen rato, a que se despejase un poco.
Una vez en el monte, tuve la suerte de animar pronto la jornada, ya que eché una arcea bastante rápido; se levantó sóla, sin dar opción a los perros.



 Fuimos en su busca y después de rebuscar y rebuscar apareció, esta vez la mostraron los perros y pude tirarle con la fortuna de hacer blanco. Más entrada la mañana los perros me pusieron otra, pero una vez más hice alarde de mi mala puntería y se fue; y nosotros también nos fuimos en su busca. La echamos en tres ocasiones más, pero ya ninguna vez en las condiciones optimas del primer levante. De todas formas estoy satisfecho con el trabajo de los perros que lograron bloquearla en dos ocasiones de las tres.

Seguimos con el itinerario previsto y continuamos con la búsqueda de alguna dama más. Rey consiguió localizar una; yo tardé un rato en llegar a él, y cuando me estaba acercando al perro, este ya alzó la cabeza y salió corriendo; la arcea se había levantado, pero yo no logré verla. Intentamos dar con ella, pero no hubo suerte.
Este año de momento no logramos hacer buenas perchas, pero nos vamos entreteniendo; y además estoy bastante contento con la progresión de Brisa que ya está poniendo arceas y trabajándolas bastante bien. El finde intentaremos hacernos con alguna becada más.

LUNES 21 Y MARTES 22 DE NOVIEMBRE

 El lunes he acompañado a una cuadrilla de amigos que tenía un cacería de menor en Teverga, al ser todos ellos aficionados a la mayor, ninguno tenía perros de memor. Así que fuí de "montero" para ellos, con Rey y Golfo.
A primera hora dimos una mano a las perdices, sin resultado alguno, ni siquiera rastros recientes de ellas; y de camino a los coches se miró un par de matas que tenían muy buena pinta para que hubiese alguna arcea por allí; pero tampoco hubo suerte.

 Después de un buen pincho, con materia prima de primera calidad, como no podía ser de otra forma en la zona en la que nos encontrábamos, y gracias a Luis; nos dispusimos a echar otra mano a las patirrojas. En esta ocasión hubo algo más de suerte y si dimos con ellas, después del buen trabajo de los perros. En el primer levante salieron largas, no aguantaron a los perros y sólo pudo tirar un tiro Iván. La segunda vez que dimos con ellas, aguantaron la muestra de los perros y tanto Luis, como Iván pudieron tirarles, pero no hubo fortuna y no se logró bajar ninguna. Seguimos intentándolo pero ya no se las pudo volver a tirar, a pesar que dimos con un par de ellas una tercera vez. Después bajamos para la zona donde estaban lo coches y la gente decidió poner punto y final al día de caza menor; nos fuimos a comer y a pasar un buen rato de charla cinegética.
Un saludo a la cuadrilla de Luis, ha sido un placer pasar el día con ellos.

Hoy martes tenía permiso para cazar en el coto de Cantabría, así que me llevé a J.Benito de acompañante y nos fuimos a la provincia vecina con Brisa y Bruno, y los trajes de agua. Día lluvioso, aunque durante el tiempo que estuvimos en el monte no llovió demasiado. Un día aburrido, muy aburrido, no vimos nada. Si tuvimos de muestra a Brisa y Bruno en una ocasión, había rastros recientes de sorda, pero ella ya no estaba y no logramos echarla, por más que la buscamos. El resto de la mañana pasó sin pena, ni gloria. Un poco decepcionante el día, ya que es una zona que siempre que hemos ido en años anteriores, siempre hemos visto varias becadas, pero hoy no hubo suerte.

SABADO 19 DE NOVIEMBRE

Hoy ha sido un día atípico; por la mañana estuvimos en un cazadero alto y bueno de entrada, pero en el cuál no vimos ni un triste rastro. Nos encontramos con otros cazadores que estaban también por la zona y el mismo resultado que nosotros, nada de nada. Así que ha eso de la una cambiamos de cazadero y probamos suerte en una zona más baja.
Nada más adentrarnos al cazadero por un camín que va pegado a un pinar Golfo echó la primera que pude abatir, con un buen cobro de Lor. En ese momento Pepín y yo nos dividimos, él más alto y yo más por el fondo de riega. Poco después de separarnos Brisa localizó y mostró una arcea entre unas escobas, me costó llegar a ella un buen rato, pero esta arcea aguantó perfectamente; el que la cagó y bien cagada fuí yo, que me la tragué con patatas. Fuí en su busca y al poco rato, de nuevo Brisa la localiza y la trabaja bien hasta llegar a bloquearla entre unas cotoyas, llega Golfo y también se queda en muestra; pero esta vez la arcea sale bastante tapada y sólo logro tirarle un disparo que lo único que hizo fué asustarla y no conseguí volver a echarla.
Unos veinte minutos más tarde escucho tres disparos de mi compañero Pepín, Lor y Lola le habían mostrado una becada en un pinar, que no logró abatir, instantes despúes vuelvo a escuchar un tiro, otra vez que se le va; estaba rabiada la jodía. Finalmente la vuelven a poner los perros y esta vez la baja, con la mala suerte que cae en un bardial de escayos, en el cuál no logra dar con ella; más tarde me reuno con él y volvemos a intertar dar con ella, pero no lo conseguimos. Una pena, dejar una arcea muerta en el monte fastidia bastante. Una vez que ya estábamos juntos echamos otra arcea, que salió sóla y luego no conseguimos volver a echarla; y también vimos ratros de otra, que me pareció oirla salir, pero no logré verla.
Así que tuvimos una tarde entretenida con movimiento de arceas y con mala suerte por no lograr cobrar la arcea matada por mi compañero.

JUEVES 17 DE NOVIEMBRE

Este jueves me he ido hasta León con J.Benito en busca de alguna pitorra. Un día climatológicamente perfecto para cazar, hacía fresco, nublado y sin lluvia, sólo faltaba que hubiese arceas; y alguna había.
Cuando a penas llevábamos una hora en el monte el collar de Brisa comenzó a pitar y cuando logré llegar a ella ya se había ido la arcea, en la rebusca fué Bruno quien la localizó y J.Benito quien la abatíó de un disparo. A unos trescientos metros ladera arriba, de nuevo Brisa cae en muestra, esta vez consigo llegar a ella y disfrutar del lance; llega Bruno que patronea y Rey que la muestra desde el lado opuesto, en esta ocasión la chocha aguanta un buen rato, sale bastante tapada, tiro ambos disparos a tenazón y voy en su busca, sin saber muy bien el resultado; cuando al rato aparece Brisa con la arcea en la boca. Estoy muy contento ya que es la primera arcea trabajada, mostrada y cobrada por Brisa, había puesto alguna, patroneado e incluso cobrado, pero siempre habían intervenido otros perros, y hasta hoy no había disfrutado de una acción integra de la perra con arcea.

Echamos otra becada tres veces, pero no fuimos capaces de verla ni una sóla vez, ya nos la había jugado el domingo pasado.
Y de regreso para el coche, sobre las tres y media de la tarde, vivimos un lance un tanto peculiar. Echamos una arcea, la cúal tiró J.Benito y decía que iba tocada de ambos tiros, que había caído muerta, en cambio a mi me pareció que iba tocada pero no de muerte, así que le decía a J.Benito que estuviese atento cuando nos dirigíamos en su busca, por si acaso. Llegamos a la zona donde nos parecía que había caído la pitorra y Rey se queda en muestra, Brisa patronea; Rey rodea la mata sobre la que estaba mostrando y Brisa se aleja de la zona, Rey vuelve a quedar puesto y de repente sale la arcea como un misil, nos la tragamos tanto yo, como J.Benito. En ese momento le comento a J.Benito -que ya veía yo como iba tocada ¡je,je!- y él me decía -que no lo podía creer, que estaba seguro de haberla tocado en ambos tiros y que estaba muerta- Con estas nos dirigimos en su busca, cuando nos aparece Brisa con la arcea muerta, resulta que eran dos, y cerca del lugar donde había caído la que había tirado J.Benito, Rey había quedado en muestra, pero sobre otra becada, que por cierto no logramos volver a echar.
Así finalizó la jornada, vistas cuatro, otra que no vimos pero que estaba por allí y cobradas tres; con un buen trabajo de los perros, en especial de Brisa y unas risas a costa de este último lance.

MARTES 15 DE NOVIEMBRE

Hoy, Laureano y yo, teníamos permisos para cazar en la reserva del Saja, en un lote que no conocíamos aún. La verdad es que este año no nos ha tocado un buen número para escoger y hemos cogido fechas y lotes que quedaban libres.
El día amanecía con algo de viento y a ratos un cielo que amenazaba agua, aunque finalmente abrió el día y el sol lució.
Laureano estuvo muy entretenido detrás de una sorda que echó en varias ocasiones, y a pesar de las múltiples muestras de su setter Baso, la arcea no aguantaba mucho y aún así logró tirarle en dos lances, aunque no hubo suerte y la sorda se quedó en Cantabria.

Yo no vi nada hasta las doce y pico del medio día, pero en ese instante se me acumuló el trabajo, y de qué manera. Cuando me disponía a cruzar una riega, Golfo, en el fondo de riega comienza a dar rastros e inmediatamente sale una sorda de la ladera de enfrente, estaba bastante lejos, pero veo la dirección que lleva, más o menos; y mientras estaba pensando por donde iba ir en su busca, sale otra arcea del mismo sitio y en la misma dirección. Avanzo unos pocos metros y escucho otro aleteo, ¡una tercera arcea! de unos metros más arriba sale sóla también, pero esta vez riega arriba. Decido ir en busca de esta primero, que está más a mano, subo por el borde de donde se había levantado y en unos pocos minutos ya damos con ella, me precipito al disparar y suelto ambos tiros sin hacer blanco cuando estaba algo tapada y luego se pasea por encima de mi cabeza tranquilamente, sólo le falto cagarme encima, y se dirige en la misma dirección que las dos primeras becadas. Miro el reloj, ya es la una, sólo quedan dos horas para tener que irnos, así que aligero el paso y en busca de las tres sordas, pero finalmente no hubo suerte y no logré dar con ninguna. En una zona donde perfectamente podría haber alguna de estas; tanto Golfo, como Brisa se quedaron en muestra muy fijos y durante un buen rato, pero ya no había nada.
Así que finalmente vimos cuatro arceas, pero no logramos hacernos con ninguna.

SABADO 12 Y DOMINGO 13 DE NOVIEMBRE

 El sábado se abría la perdiz en el coto donde cazamos en Asturias, así que decidimos ir a probar suerte con las patirrojas; además elegimos una zona donde también hay riegas para la arcea. Y así fue, que nos dirigimos hacia la zona de perdiz, subiendo por dos riegas, bastante duras por cierto, Pepín por una y yo por otra; nos encontraríamos arriba y daríamos una mano a las perdices. De las perdices vimos rastros, tuvimos los cuatro perros puestos en una ocasión y estuvimos en tensión durante unos minutos con una guía de Golfo que parecía que nunca iba a terminar; pero desgraciadamente terminó y no con un final feliz, no vimos perdices, imaginamos que ya se habrían volado anteriormente.
Y con las arceas, Pepín consiguió abatir una después de que Lola se la mostrase; y tuvimos otro par de lances en los que no había arcea a pesar de las muestras de los perros. Una de Golfo, en la cuál había rastros recientes de becada, pero ni la vi, ni logré encontrarla. Y a Pepín le pasó algo semejante unas horas despúes; tanto Lola, como Lucas quedaron en muestra, pero la arcea ya no estaba.
Mencionar que hacía un viento de Sur que daba un asco increíble, cazar en camiseta a mediados de noviembre no es un buen síntoma para los becaderos; o el tiempo da un giro de 360º, o parece que no vamos a tener un buen año de arcea.

El domingo, como la cosa en el coto de Villaviciosa sigue como sigue, es decir, todo parado... pues nos fuimos para el coto de León. Que por cierto, parecía que el día anterior había estado animado, ya que hablamos con amigos nuestros y habían movido varias becadas, muy esquivas y sin dar casi oportunidades de tiro, pero que amenizaron la jornada cinegética. Con estas noticias esperanzadoras nos fuimos para allí, el día amanecía con una temperatura agradable, auque con un viento un tanto molesto. La jornada comenzó a las 8:30 y llegamos al coche a las 16:30, vamos que estuvimos ocho horas pateando el monte, y logramos abatir dos arceas a última hora del día; parecía que las arceas del día anterior se habían ido.
La primera la echamos tres veces, en las cuales en dos ocasiones la mostró Rey, pero ya no estaba y en la última ocasión la arcea se equivocó y en su huída de mí, le pasó por encima a Fran, que de un segundo disparo la abatió. Minutos después y ya cerca del coche; suena de nuevo el collar de Rey, me acerco, rompe la muestra y unos metros más adelante vuelve a quedar puesto, esta vez la becada sale cubriendose con los robles y escobas, disparo ambos tiros, pero nada. Vuelve a ser localizada por Rey, pero en esta ocasión la chocha sale antes de que llegue al perro; y por fin a la tercera vez, Rey la muestra e inmediatamente la arcea sale, pero en esta ocasión yo estoy cerca y afortunadamente en una buena posición, que me permite dispararle un tiro y abatirla. A media mañana también tuvo opción J.Benito de matar otra, pero le salió a la espalada y lejos, aún así logró tirar ambos disparos, pero sin fortuna; por más que buscamos, no logramos volver a localizarla.
Nos vinimos para Asturias bastante contentos, ya que viendo lo difícil que nos lo pusieron las arceas vistas, logramos abatir dos de tres.

JUEVES 10 DE NOVIEMBRE



 Hoy jueves hemos tenido un día de fortuna, un día en el cuál Pepín y yo nos hemos divertido con las arceas vistas y disfrutado de varios levantes, varias muestras de los perros, varios tiros (unos acertados, otros no...) y climatológicamente un día muy agradable para cazar.
Si bien no veíamos ni rastro de becada hasta las once y pico de la mañana, luego se nos acumuló el trabajo. Y en unos doscientos metros cuadrados echamos tres arceas; arceas que por donde estaban, su comportamiento y lo delgadas que estaban eran de entrada. A excepción de la primera, que fue abatida por Pepín tras la muestra de Lucas y Lola; para las otras dos necesitamos un par de levantes. Una fue localizada y mostrada por Rey y Brisa; y la otra por Lucas, en estas ocasiones el "killer" también fue mi amigo Pepín.
Y después de un par de horas localizamos la cuarta del día; esta ya llevaba unos días por allí, tenía bastantes rastros por la zona, la cuál conocía muy bien por como nos la lió en varias ocasiones. La logramos abatir al quinto levante, después de dejarla herida ya en el segundo y no se cuantos tiros ¡je,je! vaya dura que era.
Finalmente, después de una muestra de Rey y viéndola yo en el suelo, logré abatirla del segundo disparo; por poco se va. Esta última arcea nos hizo sudar bastante para conseguir hacernos con ella, pero mereció la pena.
Un agradable día y con un buen final.

MARTES 01 Y SABADO 05 DE NOVIEMBRE



Rey y Brisa.

  El martes día de todos Los Santos me fuí en busca de alguna arcea con Rey y Brisa. Y alguna si que había, echámos una varias veces, de hecho estuvímos prácticamente toda la mañana detrás de ella. Más que una becada parecía un fantasma, cuatro muestras de Rey, y nada, ya no estaba. En el quinto levante, Brisa la atropella cuando se dirigía a la muestra de Rey que estaba unos treinta metros más abajo de donde se levantó la arcea, salió toda tapada y desapareció; para otro día.


Día lluvioso en compañía de Rey, Brisa y Ospa.



El sábado amanecía un día muy lluvioso, y así se mantuvo todo el día, o al menos durante el tiempo que yo estuve en el monte, que apenas dió tregua y la mojadura fue considerable ¡je,je! Hoy me acompañaban Rey, Brisa y Ospa; trabajaron muy bien, en especial, el veterano Rey, que parece que ya va cogiendo la forma física. De todas formas no logramos ver nada, ni siquiera un rastro de nuestras amigas.
Hoy domingo descansamos, y dedicamos el día a la familia. Esperamos que la cosa se vaya animando y haya un poco más de movimiento la próxima semana; el jueves volveremos a probar suerte.