lunes, 13 de enero de 2014

SABADO 11 y DOMINGO 12 DE ENERO

Xana y Brisa, con la arcea de la jornada.
El sábado Pepín no podía acompañarme, estaba enfermo, vaya temporada lleva el pobre. Así que me fui sólo con la compañía de Brisa y Xana; vimos un par de arceas, que nos dieron algo de juego, tres levantes a cada una y pude abatir una. La primera estaba entre pinos, con esta no estuvieron muy finas las perras, Xana pasó cerca sin enterarse y Brisa dio algo de rastro y en cuanto se quedó en muestra se levantó la arcea, se echó demasiado encima de la arcea, para seguir en racha, dos tiros y a buscarla ¡jejeje! De segundas no dio opción a las perras, ni a mí, la vi volarse sola entre los pinos y saliendo hacía una mata de avellanos cercana. De terceras, breve muestra de Brisa y consigo abatirla del segundo disparo, ¡menos mal! A media mañana tuve en muestra a Brisa durante un buen rato, con Xana a patrón; pero llegué y me coloqué bien, aunque después de una larga guía de Brisa no vi salir nada, busqué por los alrededores, pero no hubo fortuna. No vi nada más hasta aproximadamente las tres de la tarde, fue en ese momento cuando Brisa me hizo sudar para llegar a ella, cuando ya la veía, estaba de cara a mí, pues la becada azorro y me la dejé atrás; con tan mala fortuna que me salió a la espalda y bastante tapada, dos tiros por tirar y a buscarla. De segundas fue Xana la que la localizó y mostró, de nuevo le tiré un par de tiros pero sin fortuna; tampoco me salió nada favorable. Y para finalizar la volvieron a poner ambas perras, pero esta vez sólo la escuché salir.


Tino y J. Benito.
El domingo me fui con J.Benito y Tino a dar una vuelta de medio día, es la última suelta que hacen esta temporada en el coto, a ver si dábamos con alguna de pico largo de paso. Esta vez, no vimos casi caza, también es cierto que no nos gusta meternos demasiado al barullo de primera hora, donde sí que hubo bastante tiroteo. Pero en ocasiones anteriores movíamos más pájaros, de todas formas el resultado fue un faisán abatido, un par de perdices sin poder tirar y un par de levantes a una arcea, que de segundas me comí. Esta arcea salió de una pequeña mata, junto con otras dos, otro cazador hizo un doblete a cinco metros de mí, por un pelo y llego yo primero, pero…y la tercera libró de casualidad, porque yo estaba con la boca abierta, viendo el lance y cuando vi la tercera y quise reaccionar fue tarde, ayudé a cobrar ambas piezas, que cayeron en unos sitios nada favorables para el cobro y luego me fui en su busca, que fue cuando la fallé y desafortunadamente ni Tino, ni J.Benito pudieron llegar a la muestra de los perros, ni tirarle en su huida.


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